América nos lleva años de ventajas en muchas cosas, y la carne es una de ellas. Pese a que nuestra gastronomía mediterránea sea infinitamente superior, el trato que le dan a la carne es infinitamente superior. Y en este sentido, encontramos uno de los cortes más sabrosos del momento: el T-Bone de ternera. Descubre con nosotros qué es el T-Bone, por qué es tan sabroso y cuál es el mejor método para prepararlo.
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Qué es el T-Bone de ternera
El T-Bone de ternera recibe su nombre de la propia forma que tiene este corte tan singular. El hueso, que en el T-Bone se mantiene, dando estructura a toda la pieza, tiene forma de T. Este hueso tan característico se mantiene gracias a la forma de hacer el corte en la pieza, clave para la obtención de un buen T-Bone de ternera.
En este tipo de carne, el corte se emplea de forma transversal a las costillas. Esto tiene un resultado clave para que el T-Bone se posicione como una de las mejores formas de disfrutar de la carne de ternera en la actualidad: el T-Bone mantiene tanto el entrecot como el solomillo. Ambos se mantienen, pero separados por el propio hueso en forma de T.
Es gracias a esta combinación de dos de los cortes favoritos de los amantes a la carne el motivo por el que se ha vuelto tan famoso el T-Bone de ternera. Eso sí, su consumo no está del todo extendido en nuestro país, por lo que deberás buscar concienzudamente que carnicería tiene en venta cortes T-Bone de ternera de la mejor calidad.
Tipos de T-Bone
En sí, no es que haya distintos tipos de T-Bone. Sí que los hay de vacuno, y las diversas variantes afectarán al sabor final de tu T-Bone de ternera, pero no hay como tal diversos tipos de T-Bone.
Lo que varía es la forma que hacen el corte del T-Bone en función de la región del mundo en que nos encontremos. Mientras en Estados Unidos, el corte debe ser de un grosor de 24,66 milímetros, en Reino Unido el grosor exacto del T-Bone no tiene tanta importancia. Es cierto, en cualquier caso, que en este último país, el corte suele ser más grueso.
La clave del éxito del T-Bone
Sin duda, algo debe tener el T-Bone para que sea una de las carnes más buscadas en la actualidad. En primer lugar, puedes conseguir un magnífico sabor del T-Bone cocinándolo a la brasa, una de las formas favoritas de todo amante a la carne. Además, este corte tiene lo mejor tanto del entrecot, jugoso y tierno, como del solomillo, tierno también aunque con mucha menos grasa que el entrecot.
¿Cómo escoger el mejor T-Bone de la carnicería?
Son dos los principales puntos que debes tener en cuenta para asegurarte que escoges el mejor: el color y los marmoleos. Con respecto al color, este debe ser cuando más rojo brillante mejor. Esto se debe a que un color rojo brillante en tu T-Bone de ternera indica que la carne está en más que perfecto estado.
También debes fijarte en los marmoleos, o, mejor dicho, las líneas de grasa presentes en todas las piezas de carne no procesadas. Si tienen una distribución uniforme a lo largo de todo el filete, aportarán mucha ternura al mismo.
Cómo preparar un T-Bone
El T-Bone lo puedes cocinar de muchas maneras, sin importar si te acabas decantando por una parrilla, una parrilla eléctrica, o tu cocina tradicional. Al igual que en lo relativo a los lugares de cocción, el T-Bone de ternera también acepta muchas salsas, aunque, nuestra recomendación es que la primera vez que lo pruebes lo hagas solo, sin ninguna salsa. Solo así disfrutarás al máximo de este corte y entenderás por qué es tan popular en todo el mundo.
En caso de que seas un fanático de las salsas y no puedas comprender el disfrutar tu fantástico T-Bone de ternera sin acompañamiento, te recomendamos que lo pruebes o bien con la salsa española, la salsa perigourdine, la salsa cazadora, la salsa Robert, o la salsa de Oporto. Sin desmerecer a la española, nuestra recomendación, sin duda, es la salsa Oporto.
Pero bueno, vamos a lo que realmente nos atañe, a cómo preparar un T-Bone. Lo primero que debes hacer es descongelarlo, a temperatura ambiente, una media hora antes de que empieces a cocinar. También como fase preparativa previa, debes secar completamente el filete por ambos lados.
Es importantísimo que, si simplemente vas a agregar sal como sazonador a tu T-Bone de ternera, que no lo hagas en ningún caso antes de empezar a cocinarlo. Esto se debe a que al elevar la concentración de sales del exterior de la pieza, salen los jugos interiores para contrarrestarlo. En castellano, tu pieza perderá mucho sabor.
Prepara la sartén, con dos cucharadas de un buen aceite de oliva. Ya son ganas de arruinar uno de los mejores cortes de la actualidad en un aceite del montón. El fuego fuerte, y empieza a dorar tu filete. Utiliza pinzas para darle la vuelta constantemente, e incluso ponerlo vertical, para dorar los bordes también.
Cada cocina es un mundo, por lo que debes estar pendiente del punto que va cogiendo tu T-Bone de ternera a cada minuto. En cualquier caso, es habitual que con unos 5-6 minutos, tu T-Bone de ternera esté poco hecho, 7-8 para tenerlo al punto y 9-10 para que esté bien hecho.
Esperamos haberte ayudado en nuestro post sobre el T-Bone, y que ya tengas controlado qué es, de dónde procede, por qué gusta tanto y cómo prepararlo. Si tienes alguna duda o quieres comprar una barbacoa que te permita impresionar a tus seres queridos en la próxima reunión, no dudes en contactarnos.
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